La nueva oleada de expansión de la cultura del café ha traído consigo muchas novedades. No solo nos hemos habituado a comprar café en grano de calidad, sino que se han comenzado a reivindicar subproductos del café que hasta ahora pasaban inadvertidos para la mayoría como la cáscara de café. ¿Sabes lo que es?
La cáscara del café es el recubrimiento de la cereza del café, y su consumo se está extendiendo cada vez más en todo occidente. Pero hay que tener en cuenta que este elemento que hasta ahora tomábamos como un desperdicio lleva consumiéndose años y de forma habitual en países como Yemen, Bolivia o Etiopía.
Propiedades de la cáscara de café
Si bien es cierto que desde hace siglos se utiliza en las zonas productoras de café, los beneficios de la cáscara de café han pasado inadvertidos para el entorno europeo y norteamericano. Pero a la hora de hablar de estos tenemos que diferenciar entre dos tipos de beneficios: para la industria y para el individuo.
El beneficio para la industria es, sin duda alguna, el aprovechamiento total de la materia prima, reduciendo el desperdicio prácticamente a cero y mejorando por tanto la sostenibilidad de esta industria.
En lo que respecta a los beneficios para el individuo el consumo de la cascarilla de café en infusiones o preparaciones de otras bebidas es bastante amplio:
- Tiene un alto poder antioxidante.
- Tiene un alto contenido en fibra y compuestos fenólicos.
- Aporta mucha energía debido a su contenido en cafeína.
- Aporta gran cantidad de minerales, ácido clorogénico y potasio.
Utilidades de la cascarilla de café
Como ya te hemos mencionado anteriormente la cáscara de café se utiliza de manera frecuente en varias regiones. Pero, ¿con qué propósito se usa? A continuación te proponemos usos más comunes de la cáscara del café:
- Como abono: Sin duda el uso más común. Debido a su alto contenido en potasio y minerales es ideal para abonar los cultivos o cualquier tipo de planta. En el caso de las zonas cafeteras, normalmente se deja la cáscara como fertilizante del suelo en el que se volverá a sembrar café la siguiente temporada.
- Como alimento: La cáscara de café es un alimento para el ganado muy apreciado ya que tiene un alto contenido en fibra.
- Como combustible: Aunque este es uno de los usos más nuevos, la realidad es que la cascarilla de café es perfecta para la fabricación de pastillas combustibles para chimeneas o barbacoas.
- Como relleno: De la misma forma que se hace también con la cáscara de algunos cereales como el trigo, esta cáscara se utiliza también como relleno de almohadas, cojines o elementos similares.
- Como infusión: Este es el que más se ha extendido últimamente y que también se conoce con el nombre de café de cáscara. A continuación, te explicamos cómo prepararla.
Infusiones de cáscara de café
Un aparente desecho como la cáscara de café está lleno de propiedades que pueden beneficiar a tu organismo, ¿por qué no aprender a preparar una infusión con ella e introducirla en nuestra dieta?
Puedes preparar esta infusión de dos maneras:
- Llenando un infusor con 12 gr de cáscara de café por 300 ml de agua caliente y dejándolo reposar durante 4 minutos.
- Con una prensa francesa: vierte aproximadamente 30 gr de la cáscara y añade 300 ml de agua caliente. Al igual que en la opción anterior hay que dejarlo reposar 4 minutos y después presionarlo firmemente para extraer todas sus propiedades. Un proceso similar al que se sigue para hacer café de pota.
En lo que respecta a su sabor no debes preocuparte demasiado, es suave, con notas de madera, cereza y vainilla. Cuanta más cáscara de café utilices en tu infusión, más intenso será su sabor, llegando incluso a recordar a la mora o al cacao. Pero lo más importante es que está llena de beneficios para tu salud.
